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Los imputados por la violación grupal en Palermo se negaron a testificar

Los seis jóvenes imputados por su presunta participación en la violación grupal en Palermo se negaron a testificar en el primer día del juicio oral que se celebra en los Tribunales. Los individuos señalados son Ángel Pascual Ramos, Lautaro Dante Ciongo Pasotti, Thomas Fabián Domínguez, Franco Jesús Lykan, Alexis Steven Cuzzoni e Ignacio Retondo. Todos ellos fueron detenidos preventivamente en relación al cargo de «coautoría del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado».

En adición, el abogado Jorge Alfonso solicitó la anulación de ciertos elementos y anticipó su intención de buscar la «absolución total» de sus representados. Aseguró que no hay pruebas suficientes para sostener los roles desempeñados ni la existencia de un plan en el incidente, subrayando que el tema del consentimiento será objeto de debate.

El proceso judicial comenzó en el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 14 de Buenos Aires, y se inició con la lectura de las acusaciones presentadas en los documentos de la fiscalía y la parte acusadora.

Tras esto, en la fase inicial de interrogatorios, solo uno de los acusados, Ángel Pascual Ramos (24), aceptó realizar una breve declaración, aunque se abstuviera de responder preguntas. Sus palabras fueron: «Yo los conocía previamente, no abusé de nadie y no hubo un plan para abusar de nadie». 

Este acusado está aparentemente más implicado, ya que los videos lo identifican como el primero en abusar de la denunciante en el asiento delantero del automóvil. Además, los análisis periciales identificaron su material genético no solo en el fluido seminal hallado en la ropa interior y las muestras tomadas a la víctima, sino también debajo de las uñas de la joven. La fiscalía interpreta esto como indicio de que la víctima opuso resistencia durante el acto sexual y logró arañarlo en defensa propia.

Debido a la naturaleza privada del delito impulsado por la víctima, cuya identidad se mantiene en reserva, el juicio se llevará a cabo en privado. El punto de controversia será la acusación de que todos los imputados son coautores de la agresión sexual con penetración, a pesar de que no todos participaron en la violación.